La mastitis bovina es una enfermedad que es considerada como el principal problema de salud en las granjas de producción láctea, puede conllevar a una lamentable pérdida económica debido a la disminución en la calidad y cantidad de la leche. La mastitis bovina es una patología muy común en el ganado productor de leche(vacas y búfalas) que afecta su rendimiento, no sólo por lo que significa la disminución en el volumen de litros producidos por el animal afectado, sino por los altos costos que representa el tratamiento veterinario de este padecimiento. Es una enfermedad que ataca la ubre produciendo su inflamación, la mayoría de las veces como consecuencia de infecciones causadas por distintos microorganismos, especialmente bacterias como el Streptococcus.
Esta inflamación se desarrolla debido a la existencia de leucocitos los cuales son transportados hacia la ubre por la presencia de bacterias en el canal del pezón. Una vez infiltradas en el canal, las bacterias se multiplican en número y producen toxinas que causan la destrucción del tejido mamario, cambiando la composición química de la leche, disminuyendo de esta manera el potencial productivo de la ubre. La mastitis también puede ser causada por hongos o microplasmas que se encuentran en el ambiente más cercano al animal. Las fuentes principales de contaminación son, la ubre infectada y el entorno, como las manos de ordeñadores, pezoneras, paños de lavado y secado.
El grado de inflamación de la ubre es cambiante, dependiendo de la gravedad con que la glándula mamaria reacciona frente a la fuente de su irritación. De acuerdo a los síntomas, existe una clasificación para la mastitis, ésta puede ser clínica, subclínica y aguda. En la mastitis clínica se observa la inflamación a nivel de la glándula mamaria produciendo cambios en las características organolépticas, físicas, químicas y microbiológicas de la leche, siendo los síntomas: anormalidades en la secreción, tamaño, consistencia y temperatura de las glándulas mamarias; la mastitis
Mastitis subclínica no presenta síntomas inflamatorios, debe detectarse a través de pruebas indirectas basadas en el recuento de células somáticas; la mastitis aguda es la que pone en riesgo la vida del animal. Es importante considerar que se trata de una enfermedad multicausal en la que intervienen los tres elementos que conforman el triángulo epidemiológico de la mastitis, los cuales vienen a ser: las características de la ubre, las condiciones del ambiente que rodean el ganado y la variedad de patógenos que producen la enfermedad.
Es importante tomar en consideración las medidas preventivas que eviten la aparición de la mastitis en el ganado, una de ellas es la garantía del control higiénico del ambiente que rodea la ubre y en términos generales, del hato en su totalidad, que conduzca además hacia un sistema que asegure la calidad del producto y del bienestar animal. Hacer énfasis en la ejecución de una buena práctica de ordeño es primordial, siempre buscando mantener la salud del pezón en equilibrio armónico con la velocidad de ordeño. Otras medidas preventivas a considerar son las siguientes: desinfectar los pezones antes y después del ordeño, mantener en buen estado los equipos de ordeño, aplicar tratamiento de secado, garantizar una buena ventilación, proveer a las vacas de una excelente alimentación y agua, mantener a las vacas luego del ordeño un tiempo de pie. El ordeño, más allá de ser el vínculo que materializa la relación ancestral entre la vaca y la humanidad, se ha convertido en nuestros tiempos en la acción que inicia todo un proceso de transformación económica, en virtud del apoyo que por fortuna brinda los avances sen el área de tecnología agropecuaria y que impulsan el desarrollo de esta industria básica tan fundamental para el aparato productivo de un país.
Sin duda alguna, la mastitis bovina plantea un reto que el productor tiene que asumir con mucha responsabilidad y planificación en cuanto a las condiciones de higiene en el acto del ordeño, independientemente si éste es artesanal, manual o industrial mecanizado. Para ello, el productor debe considerar como aspectos fundamentales cuáles son las condiciones ambientales más apropiadas que integran el espacio del hábitat de la vaca y las tecnologías de ordeño más ajustadas por sus características de manufactura a los requerimientos del medio, dicha tecnología tal como la necesita es fabricada por Industrias BJT , empresa venezolana dedicada al diseño y elaboración de ordeños mecánicos de la mejor calidad con los que se asegura el cumplimiento de los estándares sanitarios tan solicitados para proteger el ganado y su producción. Le invitamos a visitar nuestro catálogo de productos. Industrias BJT, siempre respaldando el sector agropecuario.